sábado, 31 de octubre de 2009

La Conducta en la Misión


"Yo siempre estoy contigo, aun cuando callo y observo. Yo soy el que tú quieres que sea. Si mi nombre te disgusta, llámame como quieras, pero llámame. Ya vendrá el tiempo de ser quien verdaderamente soy. 
Tú eres Una con el Universo. Cada cosa que haces o dices por Mí está guiada. Cada acto que cometes, decisión que tomas o no, lo hago Yo por ti y a través de ti me manifiesto. Quiero que tengas todo lo que anhelas y deseo lo que tú deseas si eso te hace feliz. Lo que deba ser, será. No olvides que tu vida está antes que Yo, te agrade o no, es así. Si hubiese querido que Yo fuera primero en ti, te habría hecho monja.
Verás que juntos haremos cosas para que el mundo hable. Eres aún muy joven para dar que hablar como Yo lo espero, pero deseo grandes cosas de ti que juntos realizaremos. Tal vez éste no sea más que un nuevo paso en la búsqueda de tu verdad, que es la nuestra. Deberás dedicarte a usar tus buenas energías para dar a los demás lo que los demás requieran de ti. Ésa es tu tarea y tu misión: dar a los demás sin esperar nada a cambio. Confía como siempre en Mí; cada cosa que hagas está por Mí guiada y por Mí designada. Nada es producto del azar o de la casualidad. Todo está escrito ¿dónde? en el Gran Libro de la Vida. Todo lo que obtengas te será dado con amor. Dependerá únicamente de ti el saber recibirlo.
Dale a las personas la posibilidad de demostrarte sus creencias. Nada pierdes con ello. Al contrario, se agranda mucho más el campo de acción que tendrás después. Sé que los que te sigan me seguirán a Mí y con eso me conformo. No espero milagros de ti, sí, lo mejor que puedas hacer por nuestra causa".